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14N, Agresión, Denuncia, Derechos humanos, Huelga general, policía nacional, Tribunales
Uno de los ciudadanos de Móstoles detenidos durante el transcurso de la Huelga General del 14 de Noviembre ha denunciado una agresión por parte de la Policía.
El denunciante explica que su detención se produjo de manera aleatoria y violenta. Según la denuncia, al pedir atención hospitalaria por las posibles lesiones que le habían provocado durante la detención, los agentes encargados de su custodia se negaron a quitarle las esposas bajo el pretexto de haber extraviado las llaves, con lo que las pruebas radiológicas quedaron invalidadas.
En el parte hospitalario realizado en el Hospital Universitario de Móstoles se señalan varias contusiones en hombro izquierdo y lesiones en el músculo trapecio izquierdo.
Durante el traslado a la Comisaría de Policía Nacional de Móstoles, fue conducido a un descampado y golpeado por un agente de Policía, que le conminaba a pedirle perdón.
Sean los que sean los delitos por los que se detenga a un ciudadano, el deber de la Policía es detenerle y conducirle a Comisaría respetando su integridad física y moral. Cualquier actuación que contravenga estos principios es propia de precedentes dictaduras y, por tanto, inaceptable en un Estado de Derecho.
Las imágenes que aportan nuestros compañeros de Fotogracción de los sucesos de ese día son lo suficientemente elocuentes para mostrar qué es lo que no debe hacer el Cuerpo Nacional de Policía.